En el artículo anterior, enfatizamos los
aportes del Instituto Guttmacher y la Universidad Cayetano Heredia, quienes
aglutinaron en torno suyo a expertos de instituciones especializadas en temas
científicos y pedagógicos, entre varios textos relativos a la importancia de la
Educación Sexual Integral-ESI (1). Haciendo un apretado resumen del mencionado
documento, citando textualmente o parafraseando, puede afirmarse que la ESI es importante porque:
- Mejora la salud sexual y reproductiva de los adolescentes
(SSRA).
- Garantiza una vivencia de la sexualidad responsable,
digna y placentera con autonomía y sensatez al tomar decisiones sobre sus cuerpos
y vidas.
- Despliega en los estudiantes (niñas, niños y jóvenes) los
conocimientos, habilidades, actitudes y valores (competencias), que les
permitan desarrollar una visión positiva de la sexualidad, en el marco de su
desarrollo emocional y social fortaleciendo la autoestima y la identidad, entre
otros aspectos clave.
- El enfoque integral contempla tanto las dimensiones
socioculturales, biológicas y psicológicas como éticas de la sexualidad, así
como los enfoques de derechos humanos, género, empoderamiento e igualdad.
- El reconocimiento de la actividad sexual en la adolescencia
como una realidad, ha demostrado ser la propuesta con resultados más efectivos
a nivel global en cuanto a la mejora de la SSRA.
- Previene la violencia de género y el machismo, al educar
en equidad, igualdad de derechos y deberes, así como en democracia participativa.
En el artículo que les presentamos hoy,
priorizaremos la Resolución Vice Ministerial del Ministerio de Educación, la
RVM Nº 169-2021 del MINEDU, que establece los “Lineamientos para la Educación
Sexual Integral en la Educación Básica”, por estar directamente ligada a
nuestro sector y por ser una herramienta que ha sintetizado múltiples contribuciones
sobre la ESI (2).
Además, estos lineamientos pautan las acciones
de todos los colegios, La Casa de Cartón incluida, y nos permite, como pedagogos profesionales,
comprender, analizar, discutir, evaluar o confrontar con otros documentos, los
aspectos fundamentales de la ESI que plantea el MINEDU, para adaptarlos al
perfil de nuestro Ideario de ser el caso. Invitamos desde estas páginas, a toda
la Comunidad Educativa del Cole a familiarizarse con estas propuestas, en caso
no lo hayan hecho aún, y a participar en los espacios diseñados para ello
(Comités de Aula, Asambleas y Sesiones de Evaluación).
Volvamos al documento del MINEDU. La RVM Nª
169-2021 y los Lineamientos que contiene, definen la ESI de forma coincidente
con los aportes de las Naciones Unidas y de los informes que les hemos
presentado hasta aquí. El texto dice lo siguiente:
“De acuerdo con el Currículo
Nacional de Educación Básica (CNEB), la
Educación Sexual Integral es el espacio sistemático de enseñanza y aprendizaje
que promueve valores, conocimientos, actitudes y habilidades para la toma de
decisiones conscientes y críticas con relación al cuidado del propio cuerpo,
las relaciones interpersonales, el ejercicio de la sexualidad. La ESI toma en
cuenta las particularidades de cada etapa de desarrollo y considera las
dimensiones biológica-reproductiva, socioafectiva, ética y moral”.
Los
objetivos de la Educación Sexual Integral, entendida como un proceso formativo,
son:
a) Contribuir al bienestar y desarrollo
integral de las y los estudiantes mediante el desarrollo socioafectivo, el
pensamiento crítico, el establecimiento de relaciones afectivas igualitarias,
armoniosas y libres de violencia, el comportamiento ético, el cuidado del otro
y el autocuidado, todo ello vinculado a la sexualidad.
b) Fortalecer la convivencia
democrática, intercultural, igualitaria e inclusiva, libre de toda
discriminación, exclusión y violencia que pueda afectar el libre desarrollo de
la identidad y el ejercicio pleno de la sexualidad, con especial énfasis en la
protección de las y los estudiantes.
c) Contribuir a la prevención de
diversas problemáticas vinculadas a la vivencia de la sexualidad. (Pp.8 y 9. MINEDU 2021).
Según la misma fuente, la ESI se caracteriza por
ser:
· Formativa, ya que “fomenta una serie
de competencias y capacidades vinculadas al fortalecimiento de la identidad de
las y los estudiantes y al desarrollo de habilidades socioemocionales, pensamiento
crítico, autonomía, establecimiento de relaciones afectivas e interpersonales
armoniosas y equitativas, y comportamiento basado en principios éticos y
derechos humanos”.
· Preventiva, “porque permite
desarrollar en las y los estudiantes capacidades para la identificación de
situaciones de riesgo que puedan afectar su bienestar y/o vulnerar sus derechos
sexuales, y la práctica de conductas de autocuidado en relación con su
bienestar” (ante situaciones de maltrato o violencia física, psicológica y/o
sexual).
· Promocional y participativa, ya que
“promueve la participación e involucramiento activo y empoderamiento de los
diferentes actores de la comunidad educativa”.
· Integral, “porque aborda, según la
etapa de desarrollo, las diferentes dimensiones de la sexualidad (biológica,
socioafectiva, espiritual, política, legal, histórica, ética y cultural) desde
la articulación de los enfoques transversales, con atención al de igualdad de
género, derechos humanos, interculturalidad y de inclusión con la finalidad de
promover el bienestar de las y los estudiantes”.
· Sistemática, ya que “se fundamenta
tanto en los principios de la Ley General de Educación, así como en los
enfoques transversales, competencias y capacidades del CNEB, el cual es
culturalmente relevante y adecuado a las necesidades nacionales”.
· Progresiva, “porque la ESI se centra
en la persona y su relación con los demás, contextualizándose de acuerdo a las
necesidades de orientación que aparecen en las diferentes etapas del desarrollo
humano. Por ello, es importante abordar la ESI durante la trayectoria de vida
de las y los estudiantes ya que favorece el apego, el reconocimiento, la
valoración y cuidado de sí mismo como el del otro; la comprensión de la amistad
y el enamoramiento, la expresión asertiva y empática de los afectos. También,
promueve las relaciones interpersonales, igualitarias y democráticas, libres de
discriminación y violencia, y el autocuidado y prevención de riesgos, como
embarazos tempranos, violencia sexual, uniones tempranas, ITS, etc.”.
· Científica, ya que “se sustenta en la
evidencia de las ciencias de la salud, psicológica, sociológica, antropológica,
biológica, entre otras, y se actualiza periódicamente buscando promover el
pensamiento crítico, a partir de la evidencia, orientaciones y estándares
internacionales”.
Los componentes básicos de la ESI, que plantea la
RVM 169 del MINEDU, para alcanzar los objetivos en las instituciones y los
programas educativos de educación básica, ya sean públicos o privados, en sus
diversas modalidades, niveles, ciclos y modelos de servicios educativos, son:
1. Identidad
y corporalidad: “Implica reconocer, comprender y valorar el cuerpo, así como
desarrollar una imagen corporal positiva, que aportan a la construcción de la
identidad (y autoestima) de las y los estudiantes. Asimismo, este componente
busca fortalecer la construcción de las distintas identidades que lo definen
(histórica, étnica, social, sexual, cultural, de género, ambiental, entre
otras), reconociendo y valorando aquellos aspectos que lo hacen único”.
2. Autonomía y autocuidado: “Implica promover la
toma de decisiones conscientes, responsables y progresivas, de acuerdo a la
etapa de desarrollo y madurez de las y los estudiantes y el respeto al
consentimiento. Esta toma de decisiones comprende la práctica de conductas de
autocuidado de la salud”.
3. Pensamiento crítico y comportamiento
ético: “Engloba analizar situaciones vinculadas a la vivencia de la sexualidad,
incluyendo sus propias acciones, para tomar una posición argumentada y basada
en principios éticos y derechos humanos que aporten al ejercicio de la
ciudadanía. Se promueve el cuestionamiento de aquellos mitos sobre sexualidad,
estereotipos de género y conductas sexistas que son transmitidos por la
cultura, generando violencia de género y el análisis de situaciones actuales de
inequidad y vulneración de derechos humanos y derechos sexuales, como
feminicidios, violencia en la relación de pareja, embarazo adolescente, uniones
y paternidades y maternidades a temprana edad, explotación sexual, acoso sexual
en espacios públicos, violencia en entornos virtuales, violencia sexual, acoso
cibernético o grooming (engaño a través de las redes), entre otras. Dichos
contenidos serán abordados de manera oportuna y pertinente, de acuerdo a la
etapa de desarrollo de las y los estudiantes”.
4. Afectividad y relaciones
interpersonales: “Implica la capacidad de establecer vínculos afectivos
armoniosos a lo largo de la vida (apego, amistad, enamoramiento), de
estereotipos y situaciones de violencia. También, permite la identificación,
reconocimiento y manifestación de las emociones, la expresión asertiva de los
afectos y el establecimiento de relaciones interpersonales basadas en la
valoración de la diversidad, el cuidado del otro y el diálogo desde un marco de
derechos humanos. Este componente tiene un impacto positivo tanto en la
convivencia escolar, como en los diferentes espacios donde interactúan las y
los estudiantes”. (PP. 9-11 de los Lineamientos ESI del MINEDU).
Hasta aquí, lo que se refiere a los aspectos
propositivos de la Educación Sexual Integral para el Currículo Nacional de Educación
Básica. En el siguiente artículo, revisaremos los aspectos preventivos de la
ESI y el impacto que viene ocasionando el no contar con una política nacional que
respalde estos esfuerzos del Ministerio de Educación y de organizaciones
especializadas en el tema, relativos a la importancia de educar la sexualidad de
manera integral.
Carlos
Ureña Gayoso
Integrante de EDUCALTER
(1) “De la Normativa a la Práctica:
la Política de Educación Sexual y su Implementación en el Perú”. Centro de Investigación Interdisciplinaria en Sexualidad,
Sida y Sociedad (CIISSS) de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), y
Guttmacher Institute. Mayo 2017. Tomado de:
guttmacher.org/sites/default/files/report_pdf/de-la-normativa-a-la-practica-educacion-sexual-peru.pdf
(2)
Resolución Vice Ministerial Nª 169
2021 MINEDU. Tomada de:
https://cdn.www.gob.pe/uploads/document/file/1931935/RVM%20N%C2%B0%20169-2021-MINEDU.pdf.pdf